Un buen año escolar.

[Jóvenes]

Hace dos entradas te conté cómo podías pasártela genial durante tus vacaciones, pero puede que a ti, dependiendo del país donde vivas, te falten varios meses para recibir la visita de éstas. Por eso, este pequeño artículo te ayudará a lograr que esos días de colegio se vuelvan más llevaderos, a no ahogarte en estrés y a pensar en una buena meta escolar.

Antes que nada, busca un motivo de por qué quieres hacer de tu año escolar algo bueno. De esta forma sentirás que los días no son tan pesados pues hay una razón por tu esfuerzo y sonreirás más. Puedes pensar muchas cosas: 1) quieres obtener buenas notas para (antes que agradar a tus padres y maestros) sentirte orgullosa, 2) estás en un grado difícil con muchas tareas y proyectos, 3) el año pasado el estrés controló tu existencia e impidió que lograras lo que eres capaz o, incluso, 4) quizás estás pensando en tu futuro (todo lo que hagas con tu vida en el presente -ya tenga que ver con el colegio o no- muchas veces afecta lo que viene después. Si haces tu mayor esfuerzo pero a un ritmo manejable, abrirás las puertas de varias oportunidades).

Ahora que tienes una motivación clara, plantea una meta definida. Utilizaré los ejemplos pasados y crearé una meta para cada uno y así tendrás algunas ideas (aunque, por supuesto, puedes escoger diferentes):

De acuerdo, el objetivo claro ya está. Es hora de saber qué necesitas para alcanzar la dichosa meta. Haz una lista de cómo puedes lograrla, pero anota lo que estás consciente que puedes hacer. No te sobrepases de ideas. Un ejemplo muy fácil es el primero en la tabla: obtener buenas calificaciones. La lista puede ser:

1. Estudiar los temas nuevos cuando sean vistos en clase (olvídate del "mañana lo hago").
2. No esperar a que sea un día antes del examen para estudiar.
3. Saber que cada persona es diferente. Tú puedes necesitar dos horas para estudiar matemáticas, pero habrá quien necesite seis o siete, y así con las diferentes materias. Tú ya te conoces.
4. No conformarse con aprobar las clases. El punto de "buenas notas" es que sean lo más que tú puedas dar.

Los medios para lograr tu meta ya están. Si te das cuenta, no deben ser diez o veinte para que sea una buena lista. Ahora organízate para que los incisos sean cumplidos. Puedes distribuirlos en días concretos (por ejemplo, "hoy, 15 de octubre, voy a...") y así te supervisarás mejor.

Ten en cuenta las posibles dificultades, como el cansancio, la falta de tiempo, las tentaciones... Lucha contra ellas, no te desanimes y nunca te dejes vencer. Recuerda que una mariposa debió ser oruga antes de volverse tan bella. Si hay imprevistos, ¡y qué! Crea adaptaciones a ellos.

La voluntad influye mucho al momento de conseguir algo. Pregúntate si en verdad quieres porque, sino, no podrás llegar muy lejos.

El estrés es un factor que puede frustrarte (o ser, en algunos casos, el problema principal). Es cierto que puede ser bueno pues "te hace" trabajar, pero en exceso todo es malo. Aprende a organizarte, haz horarios, mantén un calendario de trabajo, descansa cuando sea necesario. No te dejes manipular por esa sensación de urgencia y desesperación ya que al final trabajarás de mal modo y no será sano para tu mente y cuerpo. Tampoco dejes que los demás te lo transmita, eso sólo empeora las cosas. Puedes tomarte baños calientes y emplear (sí, lee bien) menos tiempo en Internet o la televisión y aprovechar esas horas para dormir.

Muy importante: si empezaste una meta, termínala. Los beneficios serán excelentes y tendrás la satisfacción de haberla logrado. ¡Ánimo! El colegio no es para siempre, pero debe ser bien aprovechado. Disfruta con tus amigos y diviértete cuando sea el momento indicado y cuando debas estudiar, hazlo. No te arrepentirás.

Muchos éxitos y hasta la próxima.

Riri♥